Gracias a Marta de Miguel @mamiesp, incansable innovadora y emprendedora desde lo público, por regalarme este libro hace ya tiempo
¿Es la gestión por objetivos aplicada al ámbito público una auténtica catástrofe? ¿Deberíamos reducir el número de objetivos e indicadores de gestión, o mejor, hacerlos desaparecer? ¿Es nocivo un sistema de gestión diseñado mediante objetivos?
Así de contundente y provocador se muestra John Seddon en su libro “Eficiencia en el sector público. Un enfoque sistémico”, en el que, apoyado en la experiencia Británica, pone patas arriba las reformas administrativas llevadas a cabo bajo el paradigma de la gestión de Mando y Control (importado del sector privado) y cuya seña de identidad es el establecimiento de objetivos cuantitativos para medir el éxito de un servicio. Seddon, que ilustra ampliamente su tesis con ejemplos sobre la gestión pública de la vivienda social o la vigilancia policial en el Reino Unido, defiende que cualquier sistema de gestión público basado en objetivos cuantitativos nace corrupto, puesto que todo él va a enfocarse en su autoconsecución o autovalidación, mucho más que en prestar mejores servicios públicos, fin último de toda administración. Seddon advierte de que, a pesar de lo anunciado a bombo y platillo, las reformas administrativas centradas en la gestión por objetivos e indicadores han empeorado notablemente la calidad de las prestaciones y no han sido capaces de reducir los costes operativos, más bien todo lo contrario. Continue reading